Sonia Lerones: “Somos escritores más transgresores, reinventamos la forma de contar las historias”.

Quedo con nuestra invitada, la joven escritora Sonia Lerones, una tarde de enero. Nos acercamos a una cafetería repleta de gente y con la música más alta de lo normal para esas horas y comenzamos a hablar de su carrera, de su vida como escritora. Me interesa mucho su visión porque ella pertenece a una generación de escritores jóvenes, realistas, preocupados por los problemas que les rodean y que deambulan por la fina línea entre la novela juvenil y la de adulto. “Es marketing. Simplemente es una manera de encajar el libro en un sitio. Muchas son novelas adultas, que tratan temas como la salud mental, el suicidio, temas sociales. Realmente tienes una lectura adulta muy potente. Somos un poco más transgresores, reinventamos la forma de contar estas historias”, afirma Sonia.

La última novela de nuestra invitada se titula “La chica del corazón de agua”. Además, su libro fue el primero de nuestro reto #12libros12mujeres. Su protagonista, Petra, sufre depresión. No tiene ganas de prácticamente nada. Está “cansada de estar cansada”, como ella misma describe en el libro, pero, aun así, continúa con su vida: va a la universidad, intenta nadar para cansarse y poder dormir por las noches y consigue hacer amistades nuevas. Una novela que no refleja el estereotipo de depresión que el cine siempre ha intentado vender. “Esta es una enfermedad muy silenciosa, que no tiene una clase de visibilidad por ningún sitio y la visibilidad que se le da en cine es estar mal. Te suele mostrar a una persona que está muy triste, que llora mucho, que se encierra y son muchas más cosas, más factores y no a todas las personas les afecta igual.”

El inicio de «La chica del corazón de agua»

Sonia sufrió depresión entre el 2015 y el 2017. Fue en esa época, desde que no entendía qué le pasaba hasta que buscó ayuda profesional y se recuperó, cuando empezó a gestar la historia de Petra. “Esta novela surgió como un método de expresión de lo que yo sentía. No empezó siendo una novela, sino un baúl donde había una mujer que se llamaba Petra, que estaba pasando por lo mismo que yo y que intentaba contar a través de ella lo que yo estaba sintiendo. Nació como una necesidad de expresarme.”

Para Sonia, escribir esta novela cuando ya se estaba recuperando, fue difícil, pero siempre tuvo claro lo que quería contar: “lo que quería con la novela era expresar la esperanza que existe realmente de que se sale.”

Ayudar con el libro

Los que me seguís por redes sociales como Instagram, me habréis oído decir que la novela de Sonia, “La chica del corazón de agua”, me costó al principio. Es una historia lenta, pausada, descriptiva, que no empieza con una trama potente. Pero llega un punto en la novela, en los primeros capítulos, que te atrapa. Estás al lado de Petra y no es una necesidad de consolarla, es un ansia por saber qué la pasa. Sonia ha creado un personaje que explica sin dramatismos una enfermedad muy desconocida, de la que se habla muy poco, pero que cada vez aumenta más.

«No fue hasta que terminé

de escribirla cuando pegué

la remontada final.

Fue curativa.»

“El libro tampoco es un manual sobre cómo salir de la depresión”, explica Sonia, pero sí que muchas lectoras (porque es una enfermedad que afecta más a mujeres que a hombres) se han visto reflejados en su personaje. Y, sin querer, la primera fue la madre de Sonia: “pude ayudarla de alguna forma porque le di algo en lo que sentirse reflejada. Para mí eso fue lo más satisfactorio. Las dos pudimos hablar y me encontré cara a cara con lo que yo podría haber tenido, pero no tuve porque no tenía referencias, no tenía nada con lo que nadie pudiese ayudarme realmente. No fue hasta la novela cuando las dos hablamos muchísimo sobre todo lo que sentíamos.”

Escritora de «brújula»

Sonia Lerones tiene veintisiete años, es madrileña y ha publicado tres novelas. La primera, “Fugitivo”, la autopublicó y salió a la venta en el año 2015. Con la segunda, “La posada Shima” (2018), trabajó mano a mano con la editorial Onyx y la relación fue tan buena (la novela de Sonia fue la cuarta que la editorial publicó) que repitió con ellos para publicar “La chica del corazón de agua” (2019).

Su próxima novela ya ha anunciado a través de su cuenta de Twitter que se retrasa hasta el año que viene. “Uno tiene que cuidarse y yo soy una persona que no soy capaz de escribir novela por año. Por no meterme presión, he decidido darme un año de espacio para poder escribir, para poder tener otros proyectos y poder relajar un poco la presión.”

Nuestra invitada se describe como una escritora de «brújula», conoce el principio, el final y las tramas de la historia, “pero me dejo llevar por las sensaciones del momento”.

El mundo editorial de cerca

Mientras no escribe, Sonia trabaja como librera en la tienda Fnac de la calle Goya, en Madrid. Allí tiene contacto directo con el público, con los lectores, con los jóvenes lectores que, afirma, sí que leen. Y, allí, también, es consciente del mundo editorial y de la situación que estamos viviendo actualmente: “Es complicado que las pequeñas editoriales tengan cabida en las grandes librerías. Que el libro físico llegue ahora mismo a una librería es una cosa muy complicada. A no ser que se pida expresamente, cuesta. Me pasa a mí cuando me piden algún libro de alguna editorial más pequeña, que nos cuesta mucho realmente llegar ahí.”

Seguimos hablando de las grandes editoriales, de su papel en el mercado, de la figura del escritor, cómo tiene que estar presente en las redes. El escritor del siglo XXI. Ella es muy activa, twittea todos los días y, en las últimas semanas, ella y su amiga y también escritora Carolina Casado (a la que también entrevistamos en el blog) han desvelado que están escribiendo una novela juntas. Una gran noticia para sus seguidores.

Mujeres y amigas

Tanto Sonia como Carolina son dos mujeres, jóvenes y escritoras. “Escribimos muchas mujeres en juvenil. Yo nunca he decidido si me leía una novela por el sexo de quién escribía, pero ahora sí. Y también este cambio de mentalidad, de intentar dar más prioridad, te abre muchísimas más oportunidades de descubrir novelas increíbles y sí que tenemos cabida y tenemos mucha voz y muchas cosas que decir. Y es una manera de construir a la sociedad, para que pueda existir esa igualdad. Ahora mismo estamos viviendo un momento en el que la mujer está saliendo mucho y las editoriales están apostando mucho por ellas.”

«Creo que estamos viviendo una época buena

para la mujer, sobre todo a la hora de tener voz

y de exigir igualdad, porque todavía

no hay igualdad por mucho que se diga.»

Y, evidentemente, sus recomendaciones son de amigas escritoras a las que ha conocido en este gran viaje que emprendió a los quince años y que no piensa abandonar, aunque sea imposible solo dedicarse a la escritura. “Clara Cortés. Iria G. Parente y Selene M. Pascual, también serían interesantes. Julia de la Fuente es una chica de Cuenca que se autopublicó.  Su libro, “Heredera de plata”, está súper bien, una novela histórica ficcionada. También Rolly Haacht y su trilogía “Amor y virtud”, fue la primera chica que yo conocí autopublicada y que hicimos un intercambio de su primer libro y mi primer libro. Los libros nos han unido”, afirma sonriendo.

Merienda de autor

Nuestra entrevista llega a su fin. Tenía tantas ganas de conocer a Sonia, que el tiempo se ha pasado muy rápido. Seguimos charlando sobre “La chica del corazón de agua” y sobre los proyectos que tiene activos y que podéis seguir en su web. Pero no podemos irnos sin conocer su merienda de infancia. “Había unas galletas que tenían forma de animales, galleta por un lado y chocolate por el otro. Yo y mi hermana disfrutábamos como dos enanas. Los croissants con mermelada de melocotón me pierden.”

Apago la grabadora mientras nuestra conversación continúa, perdiéndose entre el ruido alto de la música del local, del que vuelvo a ser consciente, y la fascinante historia de “La chica del corazón de agua”.  

Si queréis comprar el libro, os animo a hacerlo en vuestra librería de barrio o en alguna favorita que tengáis. Buscar un buen librero o librera que os aconseje y disfrutad del placer de estar en un sitio tan mágico como una librería. Pero, si decidís comprarlo por internet, podéis hacerlo a través del enlace de abajo (en la imagen) que es mi link de afiliado a Amazon y del que me llevo una pequeñísima parte de la venta para mantener el blog y seguir recomendando buenas historias.