¡Te voy a comer!, un libro distinto para jugar y aprender sobre la cadena alimentaria

Nuestra recomendación de esta semana es un cuento para divertirse. Una historia sobre el ciclo de la vida para jugar y buscar. Un libro que engancha visualmente y que, una vez abierto, es difícil de cerrar. Al menos nosotros lo leemos todos los días.

¡Te voy a comer! es la historia del pez grande que se come al pequeño. Quien dice pez, dice cualquier otro animal. Un claro ejemplo de lo que es la cadena alimentaria. Peces, ardillas, zorros, gusanos… todos tienen alguien más grande que les quiere comer.

El libro está editado por VVKids, una editorial dedicada a la literatura infantil y juvenil, que sigue una línea de libros para jugar, aprender y practicar la agudeza visual. Libros muy bien editados, con pasta dura, y algunos en formato enorme, y sin faltarle ningún tipo de detalle. En nuestro caso, descubrimos VVKids hace unos meses y sus libros nos gustan bastante. Sobre todo para sentarse relajadamente (si es que eso se puede hacer con niños) y jugar a buscar personajes, objetos, la salida de un laberinto…

Por partes

El libro está dividido en dos secciones. La primera, donde va la mirada, que es el juego de “pez grande-pez pequeño”. Después, esa hoja se abre y aparecen más animales dispuestos a comerse a los otros animales. Una muy buena forma, también, de enseñar a los pequeños lectores que los libros no son todos iguales. No se abren y se leen de izquierda a derecha. Y después alzamos la vista hacia un paisaje donde tenemos que averiguar dónde se encuentran los cuatro animales que han aparecido en las páginas de abajo. Y aquí ya es cuando acaba conquistando a los más peques, porque no hay nada más emocionante que darles un acertijo o un misterio que deben resolver.

Su autora, Agnese Baruzzi, es escritora e ilustradora de libros infantiles. Tiene varios libros de “busca y encuentra”, entre ellos El país de los monstruos, que nosotros también tenemos, y que reseñamos en esta entrada cuando hablamos de libros de Halloween, y por el que la conocimos. Su dibujo es muy lineal, de formas geométricas, con colores muy vivos y con un uso del color muy estudiado, alternando claros y oscuros. Una manera de ilustrar en digital muy característica.

Hija de un tipógrafo y una librera, era obvio que su pasión por los libros tenía que nacerle. Y lo hizo en forma de ilustradora. Con libros que no buscan ninguna pretensión, nada más que ofrecer un trabajo de calidad con el que los más pequeños, incluso a partir de un año, puedan aprender, jugar, practicar vocabulario y, sobre todo, divertirse.

Reto la Tribu de los Inventos

Y, esta semana, no hay merienda porque tenemos reto con nuestra querida tribu Los inventos de mamá. Una comunidad de mamás inventoras que os invito a conocer porque crean unas maravillas de juegos, actividades, utensilios de decoración y todo con material reciclado. Nosotros nos unimos a ellas hace más de un año y aprendemos mucho a su lado.

En esta ocasión el reto consistía en crear algo utilizando lana, y siguiendo un poco el espíritu de ¡Te voy a comer!, hemos creado una serpiente con un trozo cartón de una caja de galletas. Mamá le ha hecho varios cortes a lo largo del cuerpo y mi hijo le ha ido liando un trozo de lana. Con esto ejercita la destreza para meter la lana en las ranuras y el movimiento de mano y la fuerza. Y, ¿qué animal más grande se comerá a nuestra serpiente? Os invito a leer el libro y descubrirlo.