En casa nos encanta pintar. El «Manifiesto para casas de verdad» de Los cuentos de Mamá nos define perfectamente. Por eso, cuando vi “El jardín de Matisse” en la biblioteca no pude resistirme a cogerlo.
Creo que dejar a los niños pintar es una de las mejores actividades que pueden realizar. Crear a su aire. O hacerlo con ellos, dirigiéndoles un poco, pero dándoles libertad para que ellos puedan imaginar. Y la imaginación es una de las claves de Matisse.
“El jardín de Matisse”, escrito por Samantha Friedman e ilustrado por Cristina Amodeo, es una iniciación a los cuadros que creó el artista. Con tijeras y papel pintado y a través de su imaginario, creó obras de arte que hoy están colgados en los museos. Y eso es lo que cuenta este libro. Esos inicios en la etapa de los “recortables” al final de su carrera. Obras como “Composición, negro y rojo” (1947) o “Polinesia, el mar” (1946).
El texto explica de manera sencilla y clara cómo fue creando esas composiciones y de dónde surgían. Y las ilustraciones de Cristina Amodeo, siguiendo el estilo del artista de cortar y pegar y combinar colores, adentran al lector en esta historia. Cristina ha sabido captar la esencia del autor.
Colección de arte
Este es uno de los seis libros que han editado en colaboración SM y el museo neoyorkino MoMA desde 2017 para acercar a los peques el arte contemporáneo del siglo XX a través de álbumes ilustrados. Unos libros muy recomendables para conocer distintas formas de arte y de estilos.
Es un libro inspirador y para tenerlo a su alcance de los peques, para que vean otra forma de crear. Yo no lo dirigiría a una franja de edad en concreto. Creo que la pintura hay que verla y que ellos experimenten sensaciones al contemplarla. Y esta colección consigue despertar esa curiosidad implícita en los peques.
La edición está muy bien cuidada y, además, incluye desplegables para poder ver las reproducciones de los cuadros de Matisse mucho más grandes. Un libro sobre todo para hojear con ellos y hablar de arte, de pintura, de cuadros… Hay que conocer qué opinan los peques.
Creamos manualidades
Y para acompañar este libro, hemos hecho unas tarjetas navideñas con material de Fixokids, gracias a la colaboración con nuestra querida tribu «Los inventos de mamá». Un material genial para los peques, con muchas cosas manejables para ellos. E incluso nos hemos animado a editar un tutorial de una de las que hemos elaborado. Podéis ver el vídeo en nuestro canal de Youtube.
Es muy sencillo pero muy representativo de lo que es pintar y hacer manualidades con peques. Su impaciencia, el querer hacerlo todo, el decidir ellos lo que quieren hacer… Como os digo, la tarjeta es muy simple, pero nos ha quedado bonita. Hemos utilizado una plantilla para delimitar a mi hijo un poco el espacio que había que dibujar, aunque es obvio que a la edad de tres años se va a salir (y de hecho, yo le dejo que se salga). También hemos utilizado lápices de acuarelas, que son geniales para pintar con ellos porque les encanta ver cómo se extienden los colores cuando echamos agua y tiras de Navidad para adornar la tarjeta.
Y, la otra, de la que no hay vídeo, es un collage que hemos realizado con pegatinas de Navidad. Le propuse que eligiera cinco pegatinas y que las pegara dónde quisiera y, a partir de ahí, inventamos historias con trozos de cartulina o goma eva. La experiencia ha sido muy buena y estamos descubriendo que, al igual que a Matisse, el cortar y pegar es una técnica que nos encanta.
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