ARCA del Mar, una visita al hospital de tortugas marinas en el Oceanogràfic de Valencia

arca del mar

Si vais este verano, o en cualquier otra época del año, a Valencia, os recomendamos ir al Oceanogràfic. Nosotros es la segunda vez que vamos, la primera con niños y para ellos es una experiencia muy enriquecedora. No solo por la cantidad de animales y especies que tienen, sino porque pueden observar el trabajo diario de los cuidadores y conocer más a fondo cómo son estos animales.

El Oceanogràfic de Valencia abrió sus puertas en el año 2003. Desde entonces, ha ido creciendo e incorporando nuevas especies para su visita. Pero no sólo es un “museo vivo”. Además de cuidar y concienciar sobre el hábitat  y las costumbres de estos animales, también recogen y cuidan a aquellas especies dañadas por la acción del hombre. De hecho, en el año 2007 nació el programa de conservación de las tortugas marinas. Gracias a la infografía para niños que realicé sobre tortugas marinas en España, he tenido la suerte de poder visitar en vivo y en directo el ARCA del Mar (Área de Recuperación y Conservación de Animales del Mar), un precioso y especial nombre para este “hospital de tortugas”, y la labor que hacen allí es impresionante.

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Entrada al Oceanogàfric
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Jose viendo cómo se mueven las medusas

Como os expliqué en la infografía, la única tortuga marina que tenemos en nuestro país es la “Caretta caretta” o tortuga boba. El problema es que solo una de cada mil sobrevive. En este espacio creado en el Oceanogràfic solo para ellas, biólogos y veterinarios se encargan de cuidar a estos animales para, posteriormente, devolverlos al mar. Desde el año 2007 han recogido a 405 tortugas y la última está a punto de volver a su hábitat este verano. Pero os cuento un poco cómo funciona y el trabajo que hacen allí.

El ARCA del Mar desde dentro

El Oceanogràfic junto a la Consellería de Infraestructura, Territorio y Medio Ambiente y la Universidad de València forman la Red de Varamientos. Estas entidades se encargan de recoger a los cetáceos y las tortugas que encuentran varados en las playas de la Comunidad Valenciana. Muchas de ellas llegan por fracturas en el caparazón o, incluso, con mutilaciones de algunas de sus extremidades al chocarse con los barcos de las costas. Al quedar atrapadas en las redes de los barcos de pescadores y subir antes de tiempo a la superficie, sufren lo que se conoce como la “enfermedad del buceador”, lo que les produce unas burbujas en la sangre, una descompresión, que puede provocar la muerte. El Oceanogràfic se encarga de remediar este mal que sufren, curar sus heridas y mantenerlas en las cámaras hiperbáricas hasta que se recuperan y sean capaces de volver al mar.

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Interior del ARCA del Mar
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Cámara hiperbárica exterior
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Tortuga marina con fractura en el caparazón
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Tortuga marina grande y ya recuperada

Durante mi visita pude ver a dos tortugas marinas recuperándose. Una de ellas estaba a punto de ser devuelta al mar. Las dos llegaron en noviembre del 2017 a las instalaciones. La primera sufría un traumatismo debido a la colisión con el motor del barco cuando fue atrapada en una red. Mide 43 centímetros e ingresó con un peso de 15 kilos, es decir, un ejemplar bastante grande. Esta tortuga estaba en la única cámara situada al aire libre del ARCA del Mar. Allí van las que ya están prácticamente recuperadas. La segunda, más pequeña, estaba en las cámaras interiores y se le notaba fácilmente la fractura que había sufrido en el caparazón por la colisión con un barco. Dos ejemplares de las 405 que han rescatado desde el año 2007.

Una vez que ya están un poco recuperadas y se encuentran en las cámaras hiperbáricas, se les instala un dispositivo de rastreo para que, cuando sean devueltas al mar, se pueda hacer un seguimiento de ellas. En algunas se pierde la señal y puede ser porque hayan muertos o, simplemente, porque el dispositivo se les haya caído. En el año 2016, el Oceanográfic devolvió al mar a diez tortugas con este sistema en el caparazón. Solo cinco siguen emitiendo señal. Podéis seguirlas en esta web.

Trabajo de concienciación

Es importante entender que este animal se encuentra en peligro de extinción y, por eso, desde el Oceanogràfic y junto a Cruz Roja, realizan charlas de concienciación para los bañistas y la población. En esas charlas se explica que nunca deben acercarse a las tortugas, ni hacerles fotos,  y mucho menos “selfies”, algo tan de moda ahora, y que deben llamar al 112 para que vayan a recogerlas. También, durante la escuela de verano del Oceanogràfic, los niños y niñas mayores de seis años puede ver el trabajo que se realiza en el ARCA del Mar y, además, comprobar en directo cómo sueltan las tortugas que se han recuperado. Una experiencia que seguro que no olvidan y que les ayuda a concienciarse sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y a los animales que viven en él. Porque ellos son el mejor altavoz que tenemos los adultos y porque, básicamente, ellos son el futuro. Si queremos seguir viéndolas hay que cuidarlas.

Y después de aprender un poco más sobre estos animales, nos fuimos a recorrer las instalaciones. Del Mediterráneo a las zonas Tropicales. De las islas oceánicas al Ártico. Pasando por los leones marinos, las belugas, que llegamos justo para la explicación de los cuidadores, los delfines, los pingüinos, los tiburones, las ibis escarlata en el aviario, un ave que le encanta a mi hijo… y así un montón de animales más. Seres vivos que conviven con nosotros, que se tienen sus hábitats y que debemos hacer todo lo posible por respetar y cuidar su espacio.

 

 

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